Hay muchas maneras de celebrar la Navidad. Quizás la más auténtica sea compartiendo lo nuestro con los demás, acercándonos a ellos, acogiéndolos entre nosotros, como una gran familia en torno a la mesa. Sin la empatía, la buena disposición y la generosidad de cada uno, se haría muy difícil atenter a tantas personas y familias que pasan dificultades muy serias en estos momentos y acuden a Renacer en busca de ayuda. No son pocas, pero no perdemos la esperanza y no nos rendimos. Confiamos en las personas de bien, que brindan su tiempo, sus capacidades, su esfuerzo, para no dejar a nadie fuera y hacer entre todos una sociedad más justa y solidaria.
Renacer cumple 35 años de vida dedicada a ayudar voluntaria y desinteresadamente a personas en riesgo de exclusión social. ¡Gracias, una vez más, a todos nuestros amigos y colaboradores!